Con detección oportuna y tratamiento especializado, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) atiende a derechohabientes pediátricos que han sido diagnosticados con algún tipo de linfoma.
La hemato-oncóloga del Hospital General de Zona No. 1, Cecilia Correa, señaló que el padecimiento afecta a los tejidos que están ligados a la médula ósea, amígdalas y adenoides, los que sirven como filtro de defensa contra la infecciones.
“En condiciones normales, los ganglios linfáticos son los encargados de producir anticuerpos y defensas contra las infecciones, pero en el caso de las y los niños puede ocurrir la situación de que se vuelva maligno y generar tumores”, advirtió.
La especialista del Seguro Social explicó que el linfoma es el cáncer hematológico más recurrente en los infantes. Por lo que un diagnóstico oncológico oportuno permite atender, tratar y preservar la vida cuando es diagnosticado en etapas tempranas.
Indicó que hay diversos tipos de linfomas, entre los que destacan el Hodgkin y no Hodgkin y son la segunda causa de cáncer en las niñas y niños que son tratados en este hospital, respecto a las causas que los originan, en los menores la célula sufre una mutación genética que le permite sobrevivir y multiplicarse de forma descontrolada, lo que origina el crecimiento de estas neoplasias.
Respeto a los síntomas, precisó que una de las características principales es el aumento no doloroso del tamaño de los ganglios de axilas, ingles y cuello, aunado a la pérdida de peso, sudoraciones nocturnas y fiebre.
“Es muy importante al detectar cualquier crecimiento en los nódulos de nuestros hijos y éstos no presentan ninguna infección que motive el crecimiento del mismo, tienen que acudir con el especialista para valorar la necesidad de una biopsia; entre más temprano sea diagnosticado, más alta es la probabilidad de sanación”, apuntó.
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